ENTRENAMIENTO PRÁCTICO DE LAS HABILIDADES MENTALES

Una de las lecciones más importantes que aprende el psicólogo deportivo cuando trabaja con entrenadores es asegurarse de que las actividades que se les presentan sean prácticas, factibles, tengan mucho sentido y gran impacto. Eso significa que el entrenador hará uso de estas actividades porque son muy específicas y relevantes para la etapa de desarrollo del tenista con el que trabaja.
En su trabajo diario los entrenadores emplean principios y prácticas de la psicología del deporte y, con una mayor estructura y claridad de propósitos, su capacidad como entrenadores de habilidades mentales se puede ver sensiblemente incrementada.
El objetivo de este artículo es presentar las habilidades mentales más importantes del tenis aplicándolas de manera práctica en el entrenamiento diario. Hemos reducido en lo posible la terminología de la psicología del deporte y nos hemos centrado en los métodos '‘directos” pues consideramos que tienen un mayor impacto sobre el desarrollo de las habilidades mentales del jugador.
Los métodos de gran impacto incluyen aquellas estrategias de entrenamiento que pueden cambiar inmediatamente el comportamiento de un jugador, así como, adecuarse y habituarse a las cualidades psicológicas a largo plazo que definen la fortaleza mental.

A continuación se presentan siete cualidades básicas junto con una breve definición, además de otras ideas fundamentales para desarrollar dicha cualidad.

1. DESARROLLO DE UNA MENTALIDAD AUTO-DESAFIANTE
Una cualidad que es básica que los jugadores posean es la capacidad de ver el éxito en el tenis en términos de mejor rendimiento personal, a diferencia de verlo simplemente como ganar ó perder un partido.
Los jugadores han de aprender que en la cancha pueden experimentar la victoria mediante su rendimiento personal, incluso cuando su rival los haya superado. ¿Cómo se prepara a los jugadores para tener esta mentalidad auto-desafiante?
Mediante establecimiento de objetivos, análisis, reforzar el esfuerzo, partidos de entrenamiento, recompensar el proceso, establecer objetivos de proceso – atribuciones según se gane o pierda el punto -, esto puede aparecer bajo la responsabilidad personal.

2. AUMENTANDO LA CONFIANZA
Uno de los elementos más importantes del estado psicológico de un jugador antes y durante un partido es la seguridad en sí mismo. Por lo tanto, ¿Qué puede hacer realmente el entrenador para 'activar' la creencia del jugador en su propia capacidad de rendir a un buen nivel y de competir eficazmente?
Uno de los medios fundamentales para desarrollar la seguridad en uno mismo es 'la persuasión verbal' por parte uno mismo y de otras personas importantes para el jugador. Animemos, por tanto, a los jugadores a que se hablen positivamente a sí mismos.

3. PERMANECER CONCENTRADO, REPETIRSE “CONCÉNTRATE”
Durante un partido se comprueba claramente la capacidad de un jugador para permanecer concentrado únicamente en aquellos elementos que son básicos para su rendimiento.
Los indicadores principales de fortaleza mental son la forma de pensar del jugador y lo que se dice a sí mismo durante un partido a medida que transcurren los acontecimientos. ¿Cómo pueden los entrenadores ayudar de verdad a sus jugadores a que permanezcan concentrados y mantengan un pensamiento positivo en todo momento?
Por ejemplo, mediante la auto-charla positiva en cancha, el concentrarse en el proceso, en el presente, realizar sus rutinas, etc. Un ejercicio puede ser el siguiente:
El jugador decide tres elementos de su rutina que pueden observarse. El entrenador y/o el rival pueden restarle un punto si se observa que no completa su rutina.

4. CONTROL DE UNO MISMO
Los tenistas mentalmente débiles cuando los acontecimientos se ponen en su contra luchan por controlar su ansiedad, su rabia, su frustración y en última instancia, su lenguaje corporal en cancha.
El perjudicado es el nivel de rendimiento del jugador, el beneficiario es el rival.
Los entrenadores son responsables de ayudar a sus jugadores a que se activen hasta el nivel emocional correcto según sea la situación, en lugar de permitir que sea la situación la que controle su nivel emocional. ¿Qué actividades ayudan a un jugador a entender, utilizar y controlar sus emociones?
Partidos en los que se cuenta el control del lenguaje corporal, desarrollo de reacciones y respuestas ante situaciones, actuar “como si” personificando emociones: ¿Actuar con energía, actuar como un tigre, etc.? Respiración y reacciones ante los errores.

5. ESCALAR HASTA LA CIMA Y MANTENERSE ALLÍ
El ganar el momentum del partido al rival y pasar a gozar de ventaja durante el partido es una habilidad fundamental. Igual que sucede cuando se le da la vuelta a un partido que durante algunas fases se ha tenido muy cuesta arriba. ¿Cómo trabajan los entrenadores con sus jugadores para que comprendan mejor ese momentum y para que mejoren su capacidad de control sobre el fluir del partido?
Animando a los jugadores a que estén listos desde el principio - los 3 primeros juegos -, jugando tie-breaks con distintos marcadores - es decir, 2-2, 2-5, …-, puntuando más los sets remontados en partidos de entrenamiento, etc.

6. LUCHAR CONTRA EL MIEDO
Todos conocemos cuáles son los puntos y los momentos decisivos en el tenis y aquellos acontecimientos que pueden atenazar el brazo de un tenista por el miedo y la ansiedad. Son las situaciones que pueden hacer que los jugadores se vuelvan defensivos y se protejan dando una imagen de incompetencia pasando a jugar seguro en lugar de dar una imagen agresiva y jugar con inteligencia. ¿Cómo trabajan realmente los entrenadores en cancha con un jugador para combatir ese miedo ante alguna situación y para que llegue a ser frío como un témpano?
Algunos ejemplos son: juegos con reglas, condiciones y limitaciones, con riesgos específicos y apuestas, tenis jugando puntos decisivos con un solo servicio o desde 15-40/40-15, etc.

7. ENTRENAMIENTO DE LA CONCIENCIA Y DE LA RESPONSABILIDAD PERSONAL
Después de un partido o durante una sesión de entrenamiento, los jugadores tienen excelentes ocasiones para mejorar la conciencia de sí mismos y para reconocer las mejoras de sus propias habilidades, además de para asumir la responsabilidad personal de su rendimiento y mejora.
La conciencia y la responsabilidad son los rasgos básicos de un tenista con mentalidad auto-desafiante. Un jugador mentalmente resistente sabe dónde está en cada momento y gracias a eso también sabe lo que tiene que hacer a continuación. ¿Qué ejercicios de entrenamiento y qué habilidades de comunicación del entrenador ayudan a los jugadores a tomar conciencia de sí mismos y a ser responsables positivamente?
Por ejemplo, ejercicios en los que han de evaluar el punto según se gane o pierda, o realizar una auto-evaluación de su rendimiento. Eso es lo que los jugadores hacen entre las sesiones de entrenamiento y resulta ser la clave.
Los entrenadores deben utilizar métodos de establecimiento de objetivos que animen a los tenistas a mejorar durante el período entre sesiones de entrenamiento.

CONCLUSIÓN
La psicología del deporte más eficaz es el sentido común estructurado en programas y ejercicios claramente enfocados a mejorar las cualidades básicas y las respuestas de los jugadores.
El conocimiento de los principios de la psicología de deporte es importante, pero lo más relevante es la capacidad de traducir estos principios en técnicas aplicables al tenis.
Creemos que cuando estos ejercicios de sentido común se ponen en práctica de manera coherente, pueden llegar a tener efectos muy beneficiosos sobre el comportamiento de los tenistas y sobre su comprensión del juego. ¡Démosles, por tanto, un entrenamiento 'estructurado'!


ANÁLISIS Y EVALUACIÓN DE PARTIDOS

Cuando analizamos el rendimiento de los tenistas actuales durante los partidos, independientemente de si son juniors o profesionales, los criterios de evaluación deben estar relacionados con las exigencias del juego e incluso pueden determinar el resultado.
Por tanto, la utilización de una tabla de evaluación, en la que los entrenadores asignan un porcentaje de rendimiento en cada set a un comentario final sobre los criterios de rendimiento importantes predeterminados puede ayudar a mejorar el análisis, identificar los puntos fuertes y débiles y, por tanto, mejorar el rendimiento.

La tabla contiene cinco (5) columnas, en la primera columna el título es “criterios de rendimiento” donde se describen “consistencia”, “dirección de la pelota”, “potencia”, “golpear pronto”, “anticipación”, “aspectos físicos”, “recuperación”, “sorpresa”, “cambio de ritmo”, “concentración”, “inteligencia”, “actitud”, “lucha, esfuerzo”, “jugar suelto”, “diversión”.

En fin, cada técnico es libre a su saber y entender de colocar tantos criterios de rendimiento que le sea posible de acuerdo a las características a evaluar de sus jugadores.
En la segunda columna se titula “1er set (%); en la tercera columna “2do set (%); en la cuarta columna “3er set (%)” y, en la quinta columna “comentarios”.
Al utilizar la tabla, el análisis postpartido sería el siguiente: en cada set el jugador se adjudica un porcentaje sobre 100 de su rendimiento en términos de consistencia, colocación de la pelota, etc., antes de anotar un comentario específico en la columna final.
Cuando los jugadores han finalizado la tabla, se reúnen con el entrenador para comentar el partido y sus propias percepciones del rendimiento.

ANÁLISIS DE LOS CRITERIOS DE RENDIMIENTO

CONSISTENCIA
El tenis es un deporte de “errores” y el jugador que comete el menor número de ellos tiene una ventaja significativa sobre su rival. Este es uno de los criterios fundamentales mediante los cuales los jugadores ganan partidos al iniciarse en la competición.

DIRECCIÓN DE LA PELOTA
Un objetivo habitual durante el partido es colocar la pelota lo más lejos posible del contrario. Algunos objetivos más específicos pueden ser jugar con profundidad o abrir la cancha.

POTENCIA
Los jugadores actuales intentan golpear con máxima potencia y control. Por otro lado, otros jugadores cuyos objetivos son simplemente pasar la pelota por encima de la red o jugar defensivamente corren el riesgo de tener menos o ningún éxito.

GOLPEAR PRONTO
Hacer “contacto” con la pelota pronto o quitarle tiempo y espacio al oponente jugando más adentro de la cancha es una característica táctica importante del tenis moderno.

ANTICIPACIÓN
Capacidad sin duda fundamental, especialmente en situaciones como la devolución, cuando se toma ventaja en golpes de fondo agresivos o en la red.

ASPECTOS FÍSICOS
Las diferentes cualidades físicas requeridas para el juego a alto nivel incluyen: la habilidad para cambiar direcciones rápida y eficientemente, estar bien equilibrado dinámicamente, poseer una coordinación excelente, y la capacidad para seguir realizando esfuerzos a altas intensidades durante largos períodos de tiempo; al tiempo que se toman las decisiones correctas durante la gran cantidad de situaciones de emergencia que se presentan.

RECUPERACIÓN
Cuando al jugador lo abren o lo desplazan, debe llegar y pegar, pero es importante que también tenga la capacidad de regresar cuanto antes a una zona de la cancha para que pueda cubrir la siguiente pelota que le van a enviar.
SORPRESA
La habilidad de sorprender al adversario utilizando de vez en cuando el juego de saque y volea o la dejada - sin “telegrafiar” la intención del golpe – debe formar parte del repertorio del tenista de élite.

CAMBIO DE RITMO
La necesidad de variar la altura, efecto, dirección, combinaciones, etc., de un golpe de forma que los rivales no se acostumbren demasiado al juego del jugador es fundamental. Esta habilidad se convierte en algo crucial más aún si se juega en cancha de arcilla.

CONCENTRACIÓN
Hablamos en este caso de la cualidad mental que puede distinguir a los mejores jugadores de los que nunca llegan a serlo. Es una de las áreas más importantes, si no la más crucial de todas, que un jugador puede mejorar. La gran cantidad de pensamientos y emociones que surcan la mente de los jugadores durante un partido exigen mantener niveles de concentración altos durante largos períodos de tiempo, al tiempo que se adoptan los niveles de activación adecuados. Por ello, las rutinas son fundamentales.

INTELIGENCIA
Los jugadores tienen que ser capaces de encontrar las soluciones apropiadas a las situaciones o problemas que se les presentan en la cancha, incluyendo la habilidad para realizar modificaciones tácticas cuando las cosas no van como se han planificado o la capacidad de evaluar los puntos fuertes y débiles del contrario y subsecuentemente atacarlos o evitarlos. Simplemente, el jugador necesita ser capaz de evaluar lo que ocurre en la cancha, seleccionar las respuestas adecuadas e implementarlas antes de que el partido se le vaya de las manos.

ACTITUD
El jugador ha de prepararse para el partido de forma profesional, entrando en la cancha con la predisposición mental adecuada, como un competidor duro, que transmite respeto.

LUCHA, ESFUERZO, ………
Para conseguir cualquier cosa en la vida se necesita esforzarse y el tenis no es una excepción. La competición en el tenis profesional e incluso aficionado de alta competencia es tan intensa que solo aquellos jugadores que poseen la ambición necesaria, la disciplina y el deseo de triunfar podrán alcanzar sus objetivos.

JUGAR SUELTO
Para tener un juego caracterizado por golpes potentes, el jugador ha de dejar que sus músculos trabajen. Si el jugador quiere moverse fluidamente en la cancha – como si volara – necesita estar calmado y relajado, pero al mismo tiempo, alerta. Cada partido es un entrenamiento serio y organizado en el que el jugador tiene que golpear la pelota con nitidez y sincronizar perfectamente los músculos incluso en las situaciones más difíciles.

DIVERSIÓN
El tenis es un juego y ha de disfrutarse como tal. Los jugadores, además de reconocer que tienen la suerte de gozar de buena salud y estar en buena forma física tienen también que apreciar el hecho de que son afortunados al jugar y ganarse la vida practicando el deporte que aman.

CONCLUSIÓN
El análisis de partidos se puede realizar de muchas formas. La tabla presentada en este artículo proporciona a los entrenadores un método mediante el cual los jugadores participan en el análisis post-partido de manera que se fomenta la sensación de propiedad sobre su propio juego y su desarrollo como jugador.
Si bien los criterios de rendimiento mostrados son cruciales para el éxito en la competición, no son excluyentes y los entrenadores pueden añadir otros que consideren igualmente importantes.


DEFINIENDO LOS MOVIMIENTOS

¿Cómo se puede describir el movimiento del cuerpo? Hay tantos términos que el entrenador de un jugador puede escoger para describir el movimiento. Al observar a un jugador que saca con muy poca flexión de rodillas, el entrenador puede decirle:
“Asegúrate de que flexionas las rodillas más” mientras que otros dirían: “Flexiona las rodillas hasta 70 grados.”
¿Es cualquiera de estas dos descripciones incorrecta? No. Sin embargo, la segunda contiene más información pues dice al jugador de forma específica la articulación que tiene que flexionar y cuanto tiene que hacerlo.
Proporcionamos a los entrenadores “definiciones” de términos relacionados con la generación de movimiento en el tenis que les ayudarán a comprender mejor el movimiento y proporcionar información más específica a sus jugadores.

DIFERENTES TIPOS DE CONTRACCIONES MUSCULARES
Las exigencias que la práctica del tenis impone sobre el cuerpo humano son grandes y, en muchas ocasiones, el sistema muscular se halla bajo presión.
Los músculos se contraen para mover o estabilizar una articulación, pero ¿sabemos que hay tres tipos de contracción muscular que les permiten funcionar eficientemente en las distintas situaciones? Los distintos tipos de contracciones son:

CONCÉNTRICA
Una contracción concéntrica es un encogimiento que acorta el músculo, y esto es lo que la gente cree generalmente cuando piensa en la contracción muscular. En una contracción concéntrica, los dos extremos del músculo se mueven acercándose. En tenis, este tipo de contracción se utiliza típicamente para acelerar los segmentos corporales.

EXCÉNTRICA
Este tipo de contracción también se conoce como “retracción que alarga el músculo” y se produce cuando los dos extremos del músculo se separan al contraerse. Este tipo de contracción ayuda a decelerar los segmentos corporales y ayuda a absorber los impactos y mejora la estabilización. Por ejemplo, cada vez que el pie toca el suelo los músculos de los cuádriceps situados en el muslo se contraen excéntricamente para proporcionar estabilidad a la rodilla y evitar que se flexione excesivamente.

ISOMÉTRICA
Las contracciones isométricas son “de longitud constante” y se dan cuando un músculo se encoge pero no hay movimiento de la articulación. Cuando los jugadores quieren estabilizar ciertas articulaciones o mantienen una determinada posición o postura utilizarán este tipo de articulación muscular. Los músculos centrales del cuerpo a menudo se contraen isométricamente para proporcionar estabilidad y equilibrio al jugar al tenis.

MOVIMIENTOS DE LAS ARTICULACIONES
También es crucial comprender los tipos de movimientos de las articulaciones que producen estas contracciones musculares. ¿Qué significa flexionar el hombro? ¿Cómo describir la acción de tocar con las manos las puntas de los pies?
Los movimientos corporales más comunes son:

FLEXIÓN
Es el movimiento de una articulación de manera que se reduce el ángulo entre los segmentos corporales adyacentes. En la mayoría de las articulaciones este movimiento es bastante simple. Cuando se flexiona el codo se reduce el ángulo del codo al mover el codo hacia el hombro. Sin embargo, en las articulaciones de la cadera y del hombro la flexión es la elevación hacia delante de la pierna o del brazo respectivamente.
En el tenis los ejemplos son:
o Flexión de la rodilla al realizar un “split step”
o Flexión del codo en un revés a dos manos

EXTENSIÓN
Lo contrario a la flexión es el movimiento de una articulación de manera que se aumenta el ángulo entre los segmentos corporales adyacentes. En las articulaciones de la cadera y del hombro la extensión es el movimiento hacia atrás de la cadera y el hombro partiendo de una posición de flexión.
En el tenis los ejemplos son:
o Extensión del codo durante el movimiento adelante de la raqueta en el servicio
o Extensión de las rodillas durante el servicio - impulso de las piernas -.

FLEXIÓN DORSAL
La flexión dorsal es el término común para referirse a la flexión del tobillo. Es el movimiento por el que se eleva la punta de los pies hacia la parte delantera de la pierna.

FLEXIÓN PLANTAR
La flexión plantar, también denominada extensión del tobillo, es el movimiento mediante el que la punta del pie se aleja de la parte delantera de la pierna.

ABDUCCIÓN
Es el movimiento de una parte del cuerpo - ej. extremidad - por el que se aleja de la línea media vertical del cuerpo. Un ejemplo de abducción sería elevar el brazo o la pierna hacia el lateral.
En el tenis el ejemplo es:
o Movimiento del brazo que sujeta la raqueta durante el movimiento atrás en el servicio

ADUCCIÓN
Es el movimiento opuesto a la abducción por el que una parte del cuerpo - Ej. extremidad - se acerca a la línea media vertical del cuerpo. Para comprobar la aducción podemos colocar nuestros brazos extendidos a los lados del cuerpo y, al bajar los brazos hacia los lados del tronco, estamos realizando un movimiento de aducción.
En el tenis los ejemplos son:
o Movimiento de la pierna más alejada de la pelota al realizar pasos laterales
o Movimiento del brazo que sujeta la raqueta a través del cuerpo al prepararse para golpear el revés

ROTACIÓN INTERNA
En tenis hablamos fundamentalmente de rotación interna en el hombro y la cadera. La rotación interna de la cadera es el movimiento que gira hacia dentro las rodillas y los pies. Para realizar una rotación interna del hombro tenemos que colocar el brazo al lado del cuerpo con el codo flexionado 90 grados, el antebrazo paralelo al suelo y la palma de la mano apuntando al frente. Hay que rotar el hombro de forma que la mano se mueve hacia el pecho, eso es rotación interna y dicho movimiento se utiliza en todos los golpes de derecha y servicios.
En el tenis los ejemplos son:
o Giro del antebrazo - como se observa por el cambio de dirección hacia el que apunta el interior del codo - durante el movimiento adelante en el golpe de derecha
o Movimiento hacia afuera del brazo que golpea la pelota durante el movimiento adelante en el servicio

ROTACIÓN EXTERNA
Es el movimiento opuesto a la rotación interna. La rotación externa de la cadera hace que los pies y las rodillas giren hacia fuera. La rotación externa del hombro puede realizarse empezando en la posición final adoptada tras haber realizado la rotación interna descrita anteriormente. Entonces hay que rotar el hombro para colocarlo en la posición en que la palma de la mano apunte hacia delante de nuevo. Este movimiento es la rotación externa, utilizado al realizar un golpe de revés.
En el tenis los ejemplos son:
o Movimiento del brazo que sujeta la raqueta que permite a la raqueta bajar y colocarse lejos del cuerpo durante el movimiento preparatorio en el servicio.
o Cuando un jugador se mueve lateralmente hacia su derecha, dará un paso y girará - rotando externamente - su pierna derecha hacia fuera, abriendo sus caderas en la dirección del movimiento.
En tenis, todas estas acciones de las articulaciones se coordinan de forma que se realizan movimientos y golpes eficientes. Como el tenis se caracteriza por movimientos en tres dimensiones y, a menudo, los jugadores tienen que diferenciar el movimiento del tren superior del inferior, no se produce ningún movimiento de las articulaciones aislado. De todas formas, se dieron algunos ejemplos de estos movimientos durante los golpes y movimientos del tenis.

CONCLUSIÓN
Ser capaz de definir con precisión los distintos tipos de contracciones musculares y de movimientos de las articulaciones no garantiza que tengamos éxito como entrenadores.
Pero saber cómo los términos presentados anteriormente están relacionados con los golpes y movimientos del tenis puede facilitar al entrenador su trabajo a la hora de analizar y mejorar la técnica de sus jugadores.

REFLEXIONES SOBRE LA PSICOLOGÍA DEPORTIVA APLICADA AL TENIS

Los tenistas de élite requieren de altas demandas psicológicas para poder afrontar los viajes, los entrenos, las presiones y los partidos desde que se inician en su formación hasta que llegan a ser tenistas profesionales y es aquí donde se requiere de la más alta fortaleza mental para diferenciarse de los demás jugadores de alta competencia.
Es vital darle la importancia debida a los aspectos psicológicos para rendir en el tenis de alto rendimiento y no solamente se deben tener en cuenta las variables mentales de visualización, concentración, positivismo, perseverancia, motivación, etc., etc y etc., sino el de tener una técnica depurada para variar los golpes ya que este ingrediente hace mentalmente más fuerte al tenista, ya que le da mucha confianza a su juego y puede recurrir en determinados momentos de un partido en cambiar la fuerza, colocación, dirección, altura y efectos de las bolas como arma táctica para afrontar los rivales que tenga en el camino ya que cada uno es muy diferente al otro.
"He visto jugadores que en una sesión de entreno practican un solo tipo de golpe y se marchan tan contentos ya que le pegan fuerte y profundo a la bola sin botarla. No recrean situaciones reales que ocurren durante el partido. La mayoría debería contar con un programa de preparación variado y tener en cuenta los aspectos psicológicos. Los mejores lo hacen así, por eso precisamente son los mejores", decía una muy reconocida tenista, Steffi Graff.
Muchas veces los errores técnicos al impactar desacertadamente una bola aparentemente fácil redunda nocivamente en la concentración y en la focalización del partido y por ende causa un impacto negativo en la motivación y autoestima del jugador del tenis. Por eso es muy importante entrenar situaciones de partido de bolas cortas, anguladas, altas, con efectos profundos, fuertes, etc y de movimientos hacia adelante, hacia atrás, laterales, explosivos, aceleraciones, frenos, etc., para minimizarlas y evitar que redunde negativamente en la psiquis del deportista.
El término deporte en nuestros días todavía es un sinónimo de una actividad alegre y en la cual uno puede disfrutar. Pero en el deporte de alto nivel ya entran otros factores de presión como son los sponsors, el público, los fans, los medios de comunicación, el ranking, el ego, los resultados y un sinnúmero de etcéteras.
En el tenis de la rama femenina, se han conocido ejemplos como el de una joven profesional "quemada" y retirada del tenis a los 17 años, otra tenista agredida por un espectador y que no pudo volver a jugar, y otro caso de una tenista comprometida en asuntos de drogas y de delincuencia.
Y el tenis masculino no es una excepción y se destacan algunos hechos tales como tenistas multimillonarios totalmente arruinados a los pocos años, juniors que prometen pero que no llegan, tenistas que ganan un gran torneo bien sea ATP-500, ATP-1000 e incluso un Grand Slam y luego desaparecen, etc. Este tipo de noticias no es privativo de la alta competición, pero parece que es allí donde más se producen.
Algún famoso tenista explicó la clasificación del ranking de la ATP y manifestaba lo siguiente: aquellos tenistas que llegan hasta el número doscientos de la clasificación son muy buenos, los que llegan hasta el número cien son demasiados buenos, los que llegan hasta el número 50 son excelentes, los que llegan hasta el número 20 son extraordinarios y los que llegan al top-10 son fuera de serie con la observación de que se pudieran mantener por lo menos dos años en dichas posiciones.
Lo importante, aunque muy valioso no es llegar, lo duro y difícil es mantenerse en tales posiciones durante un tiempo razonablemente largo. Eso da una idea de una clasificación mental y psicológica de los tenistas de alto rendimiento ya que se considera que la gran mayoría tienen una buena y adecuada preparación técnica, física y táctica.
En el mundo hay millones de tenistas que practican el tenis para llegar a ser profesionales pero solamente una insignificante cantidad logran llegar al top-10 de la WTA o ATP y mantenerse allí por un tiempo razonable. Otro grupo permanecen dentro del top-50, otro dentro del top-100 y así sucesivamente, incrementándose el número de jugadores que no llegan ni a los top-300 por diferentes motivos y muchos de ellos se la pasan jugando torneos tipo Futures, Challengers o ATP-250 y una que otra Copa Davis representando a su país porque simplemente no hay tenistas con un ranking más alto. El embudo es muy pequeño en el tubo inferior, donde llegan los grandes tenistas y enorme en el cono superior donde muchos tenistas sueñan llegar.
La gran presión a que son sometidos los tenistas que llegan alto en el ranking posiblemente sea el reflejo de la magnificación que hacen de ellos los medios de comunicación, por el mero hecho de que se trata de personas famosas con las cuáles resulta fácil fabricar una noticia. Basta con pensar en el número de practicantes para deducir que estas noticias espectaculares son mínimas.
De todas formas, es rigurosamente cierto que el mundo del tenis es posiblemente uno de los más visibles dentro del deporte mundial. Dentro de él se pueden obtener grandes beneficios personales, sociales y económicos. Pero también es verdad que tales beneficios tienen unas contrapartidas en términos de costos de adaptación a las demandas que presenta el ambiente a los deportistas que están en la élite igualmente importantes.
Y no necesariamente los jóvenes que empiezan a destacar o aquellos que llegan a conseguir unos niveles de rendimiento elevados están preparados para afrontar esas demandas. De hecho, se les pide que sean unos genios con la raqueta y que además sean buenos relacionistas públicos que cuiden de su imagen y que den a los medios de comunicación aquello que desean, lo cual significa a menudo actuar de manera diferente a como se es; que sean lo suficientemente hábiles como para confiar su preparación y la gestión de su imagen y dinero a personas capaces y de absoluta confianza; y que, además, sean capaces de entrenar lo suficiente como para mantener su nivel o mejorarlo. Finalmente, se les exige que rindan en la cancha con un nivel altísimo y constante. Porque si no, ya se sabe, pierden puntos, el ranquin baja y todo son críticas.
Para acabar de ser ecuánimes, habríamos de considerar si realmente hay más casos "noticiables" en el tenis que en otras actividades de la vida. O, de otra manera, si lo que vemos en el tenis no es más que un reflejo de aquello que pasa en toda nuestra sociedad. La respuesta debe ser que probablemente no. Por dos razones. Por un lado la actividad deportiva actúa en cierta medida como "vacunadora" frente a muchos problemas psicológicos propiciando por sí misma bienestar psicológico.
La otra razón puede ser que el número de los casos de deportistas "quemados" es sensiblemente más bajo que el de aquellos que obtienen compensaciones suficientes de esa actividad que tantas satisfacciones les produce.
Hay otro aspecto apasionante en el tenis, y en el deporte en general, y es la capacidad humana para ser capaces de mejorar el rendimiento. La lucha de los jugadores para conseguir una mayor perfección en su juego en una situación pública, en un aquí y en un ahora en la cancha. El espectador reconoce al que hace que su juego se adapte más y consiga eludir los obstáculos del rival. Una parte importantísima de ese rendimiento tiene que ver con los aspectos psicológicos.
No basta con tener la mejor técnica, la más clara visión táctica o el físico más potente, sino que el tenista ha de poseer otras armas para conseguir que esas otras cualidades se demuestren en la competición. Gana aquél que es capaz de hacer valer esos poderes en la cancha en el preciso momento en que se está jugando. Se trata de eso que comúnmente los comentaristas y el público llaman afán de superación, coraje, espíritu de lucha, capacidad combativa, serenidad, capacidad de recuperación, etc, y que es consustancial del tenis de alta competición.
La psicología deportiva ha evolucionado en el campo del tenis en dos sentidos. Uno positivo, que consiste en entrenar a los deportistas para que sean más eficaces en las prácticas y en la competición gracias a un entrenamiento psicológico bien fundamentado. En otro sentido nos referimos a la ayuda que puede prestar el psicólogo al deportista para sortear esas barreras que no se refieren al juego en la cancha, sino en su vida más allá del tenis. Para resumir este amplio campo y no extendernos hemos optado por explicar tres ejemplos que, aunque no agote el tema, pueden servir para hacernos una idea de situaciones en los que la psicología aplicada no solo puede ayudar a comprender, sino que dispone de recursos para intervenir y mejorar estos procesos.

HECHO 1. MORIR DE ÉXITO
Es un fenómeno bastante común en el tenis. Solemos creer que los deportistas que llegan al éxito deben disfrutar de grandes facilidades para continuar su carrera deportiva. La imagen que nos llega de los medios de comunicación se centra en el éxito y el mensaje es bastante unidireccional: este deportista ha conseguido lo máximo y a partir de ahora debe seguir en esta línea. Y no pensamos en detalles como que estos deportistas puede que no sean capaces de mantener un ritmo de entrenamiento y descanso similar al que llevaban antes debido a que sus agendas siempre están llenas de compromisos con la prensa, instituciones, sponsors, fans, etc.
Otro cambio importante se produce en las relaciones personales. Un tenista con éxito genera grandes ingresos económicos y necesariamente habrá gente muy hábil dispuesta a "colaborar". Los amigos pueden caer en la tentación de colocar al deportista en un pedestal. Y para el tenista resulta verdaderamente difícil discernir si el trato de los demás hacia él es debido a su persona o a sus éxitos.
Este fenómeno es fácil de observar para cualquiera que viva el mundillo del tenis un poco de cerca, además de nuestra propia experiencia. En un estudio realizado con una inmensa mayoría de campeones mundiales de diversos deportes, solo un tercio de ellos fueron capaces de afrontar con prosperidad las demandas añadidas que acompañan a su éxito y de continuar ganando; los dos tercios restantes no fueron tan capaces y no volvieron a reeditar el éxito.
Las demandas sociales son uno de los temas a los que debemos prestar atención si pretendemos entender los determinantes de la conducta de un jugador de tenis de alto nivel. Por todo esto, resulta conveniente y necesario para un tenista de alto nivel poseer recursos en su conducta para manejar todo este ambiente social. Los propios deportistas que han pasado por ello nos ofrecen algunos consejos como los que listamos a continuación:
“No temer mejorar y asumir riesgos como tenista” – “Aprender a filtrar la información y las recomendaciones de aquellos que aparecen, ya que es seguro que se recibirán grandes cantidades de consejos buenos y malos” – “Trabajar para mantenerme positivo, y centrarse en rendir para uno mismo y haciendo lo mejor que puedas. No caigas en la trampa de sentir que has de ser perfecto todo el tiempo porque es lo que se espera de un campeón” – “Buscar y utilizar el apoyo social. Usar la familia, los amigos, y entrenadores para apoyarse, mejor que intentar afrontar toda la presión por uno mismo” – “Buscar y desarrollar capacidades mentales para aprender más sobre el entrenamiento psicológico” – “Desarrollar otras facetas de la vida fuera del deporte, como pueden ser el trabajo, la educación o los amigos. De esa manera, si tienes problemas en el deporte podrás apoyarte en otros temas que te harán sentir bien y de los cuáles enorgullecerte” – “Entrenar más y mejor desarrollando habilidades de manejo del tiempo, incluyendo darse cuenta de cuando hay que dejar el tenis, y recordar que se debe entrenar fuerte y no dar nada por hecho”.
El psicólogo del deporte es un experto en el análisis del funcionamiento del sujeto en relación a los sistemas sociales que le envuelven y más que ofrecer consejos, lo que hace es enseñar al deportista como establecer sus relaciones sociales, cuáles son sus maneras de enfrentarse a ellos y como puede mejorar estas capacidades suyas para lograr mejor sus objetivos. En cierto modo "entrena" al tenista para que pueda soportar la avalancha social y sea capaz de seguir entrenando y rindiendo con garantías.

HECHO 2. NIÑOS QUE ENTRENAN Y VIVEN POR Y PARA EL TENIS.
Los determinantes sociales de que hablamos aparecen ya desde el momento en que se inician en edades muy tempranas los jóvenes tenistas. Se han conocido casos de adolescentes tenistas de gran talento registrados con contratos millonarios a muy temprana edad. Son ejemplos extremos pero representa de alguna manera a todos aquellos niños que empiezan a hacer tenis porque les gusta ya que los que le manejan su ambiente y entorno como padres y entrenadores, lo empujan para que consigan el alto rendimiento sin tener ninguna certeza sobre sus posibilidades.
Y la verdad es que resulta muy difícil mantener un buen equilibrio entre la consecución de los avances precisos para no quedarse atrás en la carrera para llegar al alto nivel por un lado y el necesario cuidado del desarrollo armónico de todas las potencialidades del niño por el otro. El dilema está servido y ya decimos que no es de fácil solución. Pero conocerlo y no apretar sin medida al niño que empieza es el primer paso para evitar que los problemas aparezcan.
Los psicólogos saben a ciencia cierta que no basta con saber que el peligro existe para que se pongan en marcha conductas tendentes a evitarlo. Por eso resulta necesario ejercer otras acciones que pueden adoptar formas variadas. Estas acciones deben ser preferentemente indirectas. Con esto se quiere decir que no es preciso que el psicólogo intervenga directamente con el niño. Una de ellas es el consejo a los padres.
Los padres pueden consultar con un psicólogo para que puedan conocer cómo pueden ayudar a sus hijos para obtener el máximo rendimiento de su deporte respetando y asegurando su bienestar. El psicólogo del deporte anima al padre a invertir en su propio hijo y puede ayudar a ambos a alcanzar los beneficios derivados de la práctica del deporte infantil. Por ejemplo, se tratan las razones por las cuales el niño practica deporte, qué valores aprende y por qué razones lo podría llegar a abandonar.
También se tratan las conductas y los sentimientos del propio padre delante de la actividad deportiva de su hijo y se le instruye en pautas claras y sencillas para ser un buen modelo para el niño. Otro tema importante es el modo en que el padre se comunica con el joven deportista para que dicha comunicación sea en términos útiles y efectivos.
Un último tema, y no por ello menos importante es tratar los aspectos sobre los cuáles debe estar informado el padre cuando tiene que hablar con el entrenador de su hijo. Se explora la utilidad de esta comunicación tanto para evitar problemas como para ayudar al entrenador en su trabajo de educar a su hijo.
El asesoramiento a entrenadores es igualmente eficaz en este sentido. El psicólogo puede ofrecer maneras de adaptar la enseñanza y la comunicación al niño tenista, e incluso puede colaborar con el entrenador para conseguir una mejor comunicación y colaboración por parte de los padres.

HECHO 3: TENISTAS CON UN GRAN NIVEL DE JUEGO, PERO QUE NO OBTIENEN ÉXITOS PAREJOS A SU CLASE
En nuestros días nadie duda de la importancia de los aspectos psicológicos en el rendimiento competitivo en el tenis. Una de las razones es la falta de técnicos especializados en el área de la alta competencia, hay mucho en fundamentación y no es lo mismo manejar jugadores en formación que gestionar jugadores formados para la élite. Pero otra razón la constituye un cierto desconocimiento de los métodos y técnicas concretos de entrenamiento psicológico existentes. Existe una tercera razón, y es un cierto aire de extraño y vergonzante que acompaña al hecho de consultar con un psicólogo. Nadie dice que a un tenista le falte físico solo porque lo vean haciendo preparación física. Y mucho menos que sea malo porque entrena la técnica. Pero. ¡ay de él si se sabe que está entrenando con un psicólogo! Afortunadamente la lógica se va imponiendo poco a poco y este último obstáculo cada vez es menos frecuente.
El deporte del tenis es una actividad en la que domina la precisión unida a la velocidad. Bajo estas premisas hay que tomar decisiones y ser capaz de leer la táctica del encuentro de manera que el tenista pueda tomar alrededor de 1.000 decisiones, se trata de una cifra promedio, seguidas, y cada una de ellas en un tiempo muy corto. El jugador en función de creencias y expectativas previas va consiguiendo un cierto nivel de rendimiento que es analizado en cada una de las paradas del juego.
La estructura del tenis es así: juegas con una intensidad alta y paras aproximadamente medio minuto y vuelves a jugar.... El "juego mental" consiste en ser capaz de adaptarse a ese ritmo. Esto incluye ser capaz de activarse, desactivarse y volverse a activar durante horas. Pero también y lo más importante es saber integrar lo que está ocurriendo y a pesar de ello, es decir se gane o se pierda, poder mantener el mejor nivel de juego de que somos capaces de realizar.
El jugador experimentado normalmente sabe cómo analizar para después ser capaz de "actuar sin que el pensamiento le paralice", o lo que es lo mismo, sabe cómo concentrarse en la jugada que hará a continuación. Y esto no se improvisa, sino que es algo que se construye poco a poco y hay que tener en cuenta que es susceptible de perderse por el influjo de experiencias posteriores. El joven tenista va aprendiendo progresivamente a concentrarse y a mantener el nivel de tensión física apropiado. Pero también va teniendo experiencias que ha de ir integrando y que pueden cambiar su manera de jugar. Veamos un ejemplo de un proceso de este tipo para que podamos entender con posterioridad como se puede entrenar.
Se está jugando un punto importante y nuestro jugador ejemplo lo pierde. Solo es otra bola más perdida. Pero como para este tenista era tan importante comienza a pensar "esto es un desastre, ahora perderé el partido" y se enfada "no tenía que haber jugado de esa manera". Centrado en estos pensamientos va a la siguiente acción. Saque o reste, aparentemente está preparado, pero su atención y confianza están ligeramente mermadas por esos pensamientos que hemos descrito.
Debido a esta pequeña merma en su concentración y decisión, su ejecución es ligeramente mala, lo cual hace que pierda el siguiente punto. "Esto es un desastre", "así no podré remontar".... son algunas de las reacciones ante esta nueva acción.
Así pues, ante un hecho terriblemente común en el tenis como es perder un punto se desencadena una reacción que no ayuda en nada al tenista a ejecutar. Y lo que hay en medio del hecho, perder el punto, y la reacción de nuestro tenista, enfado y con pensamientos negativos, no es más que el funcionamiento psicológico del jugador: es decir, se trata de algo que lo "pone" él mismo, es decir, se auto-destruye mentalmente y se sale del partido.
Nuestro jugador ha "leído" el resultado de la jugada como catastrófica y su conducta posterior se ha visto afectada por esta nueva manera de estar en el partido. Lógicamente nuestro jugador no sabe que se ha puesto él solo en esta situación, ni tiene porqué conocer los mecanismos psicológicos que han intervenido. De todas maneras, alguien que haya jugado tenis debe notar que si ha vivido esta situación, como el hecho de perder una bola, de una manera negativa por razón de sus mecanismos psicológicos, es perfectamente posible que consiga verla de una manera diferente ya que depende exclusivamente de él.
En el fondo de esta manera de vivir el punto hay por las razones que sea, una percepción de amenaza. Nuestro tenista tiene presente en ese preciso instante que perder ese punto era mucho más que eso. Tiene miedo a perder mucho más, los siguientes puntos, el juego, el set, el partido, y con ellos su propia autoestima, la buena opinión que tienen los demás de él, etc. Y ello lo paraliza. No importa que tal pensamiento sea irracional, él lo cree y esta creencia dispara sus emociones que hacen que su brazo se tensione y se encoja y que su concentración se pierda.
Nuestro jugador, de haber rendido bien a nivel psicológico, podría haber pensado que esa bola la perdió porque no corrió lo suficiente para colocarse correctamente y que debía centrarse más para conseguirlo en las siguientes jugadas. A partir de aquí podría haberse dedicado a caminar con calma y a hacer un par de respiraciones profundas para calmarse y ser más eficaz en el resto o en el saque siguiente. Y mientras se dirige a la posición pensará en el tipo de juego que le intentará hacer su oponente y en superarlo. Y sentirá que disfrutará con el desafío que le supone ganarle.
Gracias a haber establecido un buen estado de ánimo y un correcto nivel de activación seguramente le resultará más fácil concentrarse y hacer sus conductas del saque o resto con más eficacia... y es mucho más probable que gane el siguiente punto.
La gente en general y los tenistas en particular creen que este tipo de conductas son " innatas" o "que se tienen o no se tienen".
Esta es una creencia falsa que se mantiene a pesar de que todos hemos visto casos de tenistas que unas veces se comportan con una gran concentración y determinación y otras no, y de que hay tenistas que han sido capaces de rendir a un gran nivel y después han perdido esta capacidad. La gente puede cambiar sus conductas. A pesar de que no es fácil, los tenistas son seres humanos. Igual que se puede entrenar a un tenista para que mejore su drive o su resistencia es posible mejorar su concentración.
Los psicólogos del deporte han ido creando y perfeccionando métodos y técnicas para entrenar estos aspectos. Un procedimiento eficaz de concentración positiva es la famosa "estrategia de entrenamiento de la ejecución entre puntos" para los partidos de tenis, partiendo del hecho que del tiempo total del partido solo se está en juego entre un 20% y un 10% del tiempo, dependiendo de la superficie, y de la presunción que los patrones de pensamiento y conducta en el tiempo de no-juego juegan un papel muy importante en la ejecución motriz durante el juego.
Durante dichos cortos lapsos de tiempo se deben ejecutar con espontaneidad las rutinas mentales de focalización, visualización, atención, concentración y auto-diálogo positivo para planificar la siguiente jugada, punto por punto. Durante los tiempos de no-juego se desarrolla una “secuencia rápida de cuatro etapas” como son la respuesta física positiva, la respuesta de relajación, la respuesta de preparación y la respuesta ritual propia del tenista.
La psicología deportiva ha estado desarrollando una metodología para construir rutinas que abarquen no sólo una situación concreta de la competición como la conducta entre puntos, sino todas aquellas situaciones que son importantes para el rendimiento. En nuestro trabajo intentamos considerar todas las situaciones que se dan en una competición desde e l momento en que el deportista comienza a prepararse para la misma. A esto lo de nominamos Plan de Competición.
Para cada una de estas situaciones intentamos diseñar y posteriormente entrenar cuáles son las conductas idóneas para obtener el resultado competitivo deseado. A continuación presentamos un ejemplo muy simplificado de uno de estos planes de competición. Se trata de un ejemplo hipotético en el que se mezclan conductas de varios tenistas, a pesar de perseguir unos mismos objetivos.
Cada tenista tiene unas características propias respecto a su capacidad para controlar su concentración o para controlar su nivel de tensión, que hacen necesario siempre individualizar para cada tenista los contenidos del plan de competición. Por lo tanto, el ejemplo que sigue tiene una finalidad ilustrativa. Además, se debe tener en cuenta que se describen las conductas con mucho detalle para que se puedan entender. En un plan concreto de un tenista estas descripciones pueden ser muchísimo más esquemáticos y sencillos:

SITUACIONES Y CONDUCTAS
NOCHE ANTERIOR. Si conozco al contrario ya he establecido las tres ideas principales de táctica para jugar. Preparo bien y me aseguro que esté todo el material en el bolsode tenis. Me voy a descansar con tiempo suficiente.
LEVANTARME. Me levanto mínimo 3 horas antes del partido. Vaya a hacer un poco de trote suave por 15 minutos. Después ducha y desayuno ligero y repasar todo el material, que no falte nada.
DESPLAZAMIENTO. Ahora lo único que tengo que hacer es estar tranquilo. Para eso escucho música y me distraigo hablando o pensando en temas diferentes al tenis.
LLEGADA. Controlo dónde jugaré, y a qué hora calentaré y con quien. Evito a la gente, siendo cortés pero firme.
CALENTAMIENTO GENÉRICO. Estiramientos con atención en las sensaciones. Subo el ritmo poco a poco. Calentar brazos y piernas es importante.
CALENTAMIENTO ESPECÍFICO. Comienzo el peloteo dejando que salga la técnica. Caliento cada golpe técnico sin importar el rendimiento.
SERVICIO (ESTRATEGIA DE ENTRADA). 1. Mientras voy al lugar del saque hago una respiración profunda. Voy botando la pelota con la raqueta soltando mis músculos.
2. Me coloco en posición y doy tres botes a la pelota mientras compruebo que estoy en equilibrio. Concentro mi atención en un el punto en el que quiero sacar e imagino mi servicio.
3. Lanzo y saco.

SITUACIONES ESPECIALES
- En el segundo servicio el procedimiento de concentración es exactamente el mismo.
- Si me noto tenso o cansado voy más lento al lugar de saque y hago más botes al recibir la pelota para ajustar la tensión de mi brazo.
- Cuando no tengo claro cómo hacer la jugada no hay prisa. Hago una respiración y trato de visualizar la jugada con calma.
RESTO O DEVOLUCIÓN
Cuando el contrario se coloca en la posición para servir:
1. Respiro.
2. Miro la figura del que saca mientras tengo en todo momento mis pies activos.
3. Reacciono con velocidad y con decisión en mi golpe.
SITUACIONES ESPECIALES
- En el caso que el contrario se pare por cualquier causa o pierda tiempo intencionadamente, es muy importante no perder la concentración pensando. Simplemente, lo que he de hacer es parar el procedimiento y relajarme un momento, hacer unos movimientos y volver a empezar el procedimiento, tan pronto como el adversario se vuelva a colocar en posición.
FIN DEL PUNTO
1. Analizo lo que ha pasado, haya ganado o perdido, solo es un momento. Después olvidar el punto anterior y concentrarme en el siguiente punto.
2. Mientras vaya sacar o a restar me centro en mantener el ritmo. Agresividad y activación justas. Uso palabras de ánimo. Esto debo hacerlo con decisión. No me dejo ir.
3. Una vez en el lugar de saque o resto inicio mi estrategia.
En bolas dudosas o decisiones del juez que me perjudican lo único que hago es dar a conocer mi opinión con firmeza, y si es preciso pido conformidad a los jueces. Una vez se ha decidido, vuelvo a mi pauta con más interés que nunca. Solo es un punto más y si me altero yo seré el único perjudicado.
DESCANSOS
Beber desde el primer descanso, secarme y descansar es lo importante. Si es preciso, repaso las ideas básicas de la táctica y decido si estoy bien centrado. Insistimos en que este ejemplo es solo con fin es ilustrativo, no una receta que sirva para todo el mundo. Es el psicólogo del deporte quien ayudará a construir, adaptar y perfeccionar ese plan para cada situación y sujeto particulares.
Pero obviamente, el entrenamiento no acaba con el plan, sino que éste es el principio. A partir de la descripción del orden correcto de las conductas del tenista hay que establecer una metodología para entrenarlas. Y esa metodología debe incluir cómo hacerlo hasta llegar a la situación de competición con un gran nivel de concentración y focalización en la misma.
Los psicólogos del deporte disponen de técnicas y métodos para conseguir estos resultados. Gracias a ella se determinan que es posible realizar experiencias controladas en las que distingamos qué conductas son más apropiadas para conseguir un cierto rendimiento y que gracias a ellas podamos mejorar los métodos y contenidos del entrenamiento.